Pocos juegos son capaces de generar más discordia que el Monopoly. ¿Quién no ha acabado muy enfadado tras hacer una mala tirada y verse obligado a ceder todas sus posesiones a un amigo? Lo que pocos saben es que han llegado a haber asesinatos por su culpa.
Uno relativamente reciente fecha de 2007. La adolescente de 18 años Alexandria Clouse-Desmond estaba jugando al Monopoly con cuatro amigos, y poco a poco la partida se fue calentando. Al final, la pobre chica recibió una paliza monumental y murió estrangulada. Su cuerpo fue encontrado en un horno. Los cuatro asesinos fueron acusados con asesinato de primer grado y cumplen ahora condena; todos ellos tenían problemas mentales.
¿Quién habría dicho que un juego de mesa podía llegar a ser tan peligrosos?